El pasado fin de semana, se informaba sobre el supuesto robo de un Fiat Spazio, que se encontraba estacionado cerca de La Sibila, el cual fue remolcado por desconocidos en una camioneta Saverio. El acusado llamó al sitio local 03442 para hacer su descargo y contó con lujo de detalles lo que le estaba sucediendo.

Tras el hecho delictivo, y con el correr de las horas, se supo que la Policía realizó el secuestro del rodado en cuestión, y también de la camioneta presuntamente usada en el hecho, quedando imputado un hombre por el robo.

Este jueves por la tarde, se comunicó Federico Giarrizzo, el involucrado en el suceso, quien pidió hacer su descargo ante los hechos que se le endilgaron.

«No hacían la transferencia»

El imputado contó que el auto que llevó a este incidente era de su esposa y está a su nombre, el cual se había vendido hace dos años a estas personas, que pese a los intentos de lograr que se transfiriera, jamás le hicieron caso.

“El auto circulaba sin seguro, yo tenía que pagar las patentes y además estar preocupado por si tenían algún accidente y tener que hacernos responsables. Nunca me daban os datos para hacer la denuncia de venta y se nos reían en la cara y esto me llevó al límite”.

Un momento de bronca

Giarrizzo siguió contando lo que le estaba sucediendo y que esto derivó en lo que llamó “Un momento de bronca”, que lo llevó a tomar una decisión tajante.

“No quise seguir en esta situación y me fui a buscarlo de esta manera con la intención de que de esa forma se vea obligado a transferirlo. Se que el método usado estuvo mal y no correspondía, pero fue lo que me salió. Así fue que me denunció y después quiso retirar la denuncia y no se lo aceptaron”.

“Yo le dije a la Policía”

El comerciante denunciado por el supuesto robo, fue terminante al señalar que “Yo les dije a los policías que lo tenía en mi casa y allí fueron a retirarlo. Nunca se fijaron ni se interesaron en saber quién era el titular y así se hubieran dado cuenta que está a nombre de mi señora.”

“No somos ladrones”

Continuando con su relato, Federico resaltó que “Trabajamos todo el día con mi señora, para terminar como ladrones. Es un auto destruido que no vale nada y si lo hice, fue para evitar un posible problema futuro. Lo que más me duele es lo de la camioneta, que es de un amigo que me hico el favor. Ojalá se sepa la verdad y que la gente sepa lo que sucedió. No somos ladrones de autos”, finalizó.

Crédito: 03442

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