La tercera marcha por la inseguridad realizada en Concepción del Uruguay durante este sábado; mostró que se trata de un reclamo genuino, debido a la cantidad de asistentes en medio de una jornada lluviosa y que tuvo una tormenta de agua a la misma hora que estaba pactada la convocatoria (20 horas en plaza Ramírez).
En esta oportunidad, los manifestantes fueron más contundentes a la hora de presentar una postura, ya que firmaron un escrito; el cual leyeron simbólicamente frente a la Jefatura Departamental Uruguay. En el texto, al que tuvo acceso La Calle, se pueden apreciar una serie de reflexiones y reclamos que deben ser evaluados con cautela y siempre dentro del ámbito de la democracia.
Es evidente que existe un notorio incremento de la inseguridad, a nivel local y nacional, pero eso no debería convertirse en un motivo para avanzar sobre las libertades de tránsito de los ciudadanos. Por otro lado, la bronca y la desilusión por la multiplicación de crímenes sin sentido en la ciudad, lleva a que surjan reclamos de medidas extremas para afrontar el actual contexto.
La nota está dirigida a dos personas importantes en el funcionamiento diario de la ciudad, pero puede ser interpretada como una intención de poner de generar un debate en la sociedad uruguayense, que permita afrontar el actual contexto de la mejor forma posible: “Concepción del Uruguay, Enero 2022. Sr Intendente Dr. Martín, Oliva. Sr .Jefe de Policía Martín, Gaillard”.
El resto del escrito enumera los motivos de la marcha de este sábado, enumera una serie de reclamos justos y también plantea algunas “soluciones” para la inseguridad que no son viables; luego de tanto tiempo de lucha para adquirir ciertas libertades que deben ser innegociables:
PETITORIO COMPLETO
“Mediante la siguiente nota nos dirigimos a usted en carácter de ciudadanos, a fin de acercarle las siguientes demandas que acordamos un grupo de padres, madres, hijos, familiares, vecinos y vecinas de Concepción de Uruguay, en el marco de los últimos acontecimientos de violencia que se suscitaron en nuestra ciudad.
Llevar adelante desde su jefatura en conjunto con otras fuerzas y el estado municipal una política concreta que apunte a la prevención del delito en la ciudad.
No alcanza con patrullar las calles, necesitamos que las fuerzas de seguridad se involucren y lleven adelante acciones efectivas.
Que se identifiquen aquellas zonas vulnerables donde se llevan a cabo hechos delictivos con mayor frecuencia, y que se brinde protección a los vecinos y vecinas que transiten por esos lugares. Que se priorice la vigilancia en esos sectores y que se adopten medidas de control a través de cámaras de seguridad u otros dispositivos.
Que se pida identificación a todo ciudadano (sean menores o mayores) que se encuentren circulando o localizados en cualquier punto de la ciudad sin justificación alguna.
Que se intensifiquen los controles vehiculares de dudosa procedencia que circulan por la ciudad.
Que el derecho a salidas transitorias que tienen las personas privadas de su libertad sean supervisadas de manera responsable por quien corresponda.
Es imperioso un sistema policial que apunte a los verdaderos responsables de los acontecimientos de violencia e inseguridad. No queremos una policía cómoda que estigmatice por prejuicio. La institución, mejor que nadie, sabe las puertas que tiene que abrir, pero muchas veces prefiere la comodidad que no es otra cosa que complicidad.
Queremos, los vecinos y vecinas uruguayenses tener el privilegio de poder salir de nuestras casas y volver sanos y salvos.
Queremos el privilegio para nuestros hijos de que puedan divertirse con la seguridad de que no serán víctimas de este sistema injusto y violento que hoy nos atraviesa.
Somos conscientes de que urge una reforma en el sistema judicial, que no es justicia si el violador, el asesino o el femicida caminan impunes por la calle, mientras nosotros seguimos reclamando por penas justas y sentencias firmes que nos permitan vivir en un lugar un poco menos violento sin ser escuchados.
Solicitamos a las autoridades y sobre todo a la comunidad uruguayense que no nos deje solos en esta lucha.
Las vidas que quedan por proteger son el motor de la misma y la memoria de nuestros muertos son el impulso para llevarla adelante a pesar de tan inconmensurable dolor.
Reclamamos una pronta respuesta de las autoridades judiciales y policiales competentes. Como así también pediremos su remoción en caso de no estar a la altura de las circunstancias.
Que se esclarezcan los hechos suscitados con celeridad y que se lleve adelante el debido proceso de justicia. Justicia para las víctimas, sin justicia, no habrá paz.
No vamos a detener esta lucha, que es como una gota de agua en el mar, preferimos eso a no intentarlo, por nosotros y por todos quienes anhelamos habitar en un lugar seguro y en paz”.
La marcha fue convocada por un grupo de familiares y amigos de víctimas de diferentes hechos de inseguridad, que se organizaron bajo las consignas enumeradas en esta nota y que prometen seguir tratando de exponer la actual situación en las calles uruguayenses. (La calle)
