El arzobispo de Paraná, Juan Alberto Puiggari, pronunció un duro discurso contra el proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), que el jueves 10 de diciembre comenzará a discutirse en la Cámara de Diputados de la Nación. “Sería la primera vez que Argentina legisla la pena de muerte”, lanzó este lunes durante una misa en la Parroquia Nuestra Señora de La Paz, en La Paz, a 163 kilómetros de la capital provincial.
La IVE es impulsada, como todos los años, por la Campaña por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito, pero este año se suma también el proyecto que envió el presidente Alberto Fernández, a mediados de noviembre. Y según un sondeo del sitio especializado parlamentario.com, surge que hay, en principio, 123 votos a favor, 109 en contra y 24 indefinidos. El miércoles se firmará el dictamen y el jueves se tratará en el recinto de Diputados.
En el marco de una misa por la Inmaculada Concepción de María, en La Paz, Puiggari cargó contra los legisladores que debaten el proyecto del aborto.
«Tengo que decirle que como Episcopado sentimos una enorme tristeza y nos sentimos profundamente desilusionados. En este momento de la historia argentina, donde hay problemas gravísimos, los legisladores están pensando en legislar una ley de aborto. Sentimos que nos han dado un cachetazo», dijo en la parte final de la misa, que duró casi una hora.
Luego, cuestionó que se discuta el texto de ley «cuando toda la Iglesia ha estado preocupada en cuidar a nuestros hermanos enfermos y a los que tenían hambre» y «mientras el pueblo argentino necesita muchísimas cosas».
«Hoy nos tiene que doler que estemos hablando de casi un 50% de pobres en el país del trigo. Estamos pensando con una mirada egoísta en eliminar a niños. Sobre todo, lo más indignante es que usen a los pobres como bandera. Está probado que los pobres no quieren el aborto, porque para ellos sus riquezas son los hijos. Por eso, estos días les pido que recemos mucho a la Virgen, para que nos libre de este mal tremendo. Sería la primera vez que Argentina legisla la pena de muerte. Las cosas hay que decirlas por su nombre: es una pena de muerte encubierta, bajo el pretexto de los pobres», planteó más adelante.
Por último, pidió no “arrodillarse” ante “doctrinas extrañas y foráneas» y volvió a pedir unión para salir de la pobreza. «Argentina necesita que nos unamos para salir de esta cosa que nos avergüenza como país, y es que haya un 60% de jóvenes y niños pobres».
Poco antes de concluir con su alocución, pidió rezar para «que nos descubramos como hermanos que queremos ayudarnos para hacer una Argentina grande y digna, siguiendo sus orígenes y no estas doctrinas extrañas, foráneas, porque nos son nuestras, nos las exponen desde afuera; y que estamos servilmente poniéndonos de rodillas. La Virgen nos enseña a ponernos de rodillas sólo ante Dios».
Entre Ríos Ahora
