El pequeño de Caseros, que hace más de dos semanas sufriera severas quemaduras en su cuerpo, continúa internado en el Hospital San Roque de Paraná, recuperándose tras las distintas intervenciones quirúrgicas a la que fue sometido. Como se recordará, el niño sufrió el accidente ígneo cuando manipulaba una bomba de nafta dentro de un tarrito y este explotó, provocando que las llamas avanzaran sobre su persona, siendo socorrido por amigos y vecinos.
De acuerdo a la información actualizada, que allegados a la familia nos pudieron confirmar, Agustín continúa en una sala aislado, pero ya fuera de terapia. El niño sigue con los altibajos lógicos de dolor y de estado de ánimo, considerando la gravedad de sus quemaduras, pero pese a ello, los médicos no dejan de resaltar que la evolución sigue siendo buena y de acuerdo a lo esperado, al menos se está logrando lo más importante, que es el hecho de que no surjan complicaciones infecciosas o similares.
El menor ha comenzado a caminar (deambular) por su cuenta, con la intención de ir reanimándose por sí mismo y de a poquito y retomando la normalidad motriz, como así también nos comentaban que debe ingerir mucha agua. Vale recordar que ya transcurrieron 17 días del lamentable accidente, siendo que muchos de estos los pasó en terapia intensiva.
La evolución de Agustín es lenta, minuciosa, pero sostenida. Desde aquí le deseamos a él y a su familia, los mejores deseos de recuperación y que pronto pueda retornar a su hogar, de la mejor manera.
Fuente: Chanito Barragán (Resume local) – Redacción: Génesis24
