Un terrible hecho de sangre sacudió este martes por la mañana a los vecinos del Barrio San Isidro de Concepción del Uruguay, cuando la Policía confirmaba el hallazgo de una pareja muerta en una vivienda, la que presentaba evidentes signos de violencia.
El trágico hecho tuvo lugar en una casa de calle Urquiza 1014, a metros de calle Las Glicinas, donde un hombre que fue al lugar, halló signos de un principio de incendio y al ver que nadie contestaba, dio aviso a la Policía.
Inmediatamente arribaron móviles al domicilio, cuyos funcionarios abrieron la puerta y al ingresar encontraron signos de haber existido fuero y un fuerte olor a quemado y a gas, que tornaba imposible respirar en la vivienda.
Según publica el sitio uruguayense 03442, los uniformados hallaron una garrafa abierta y mientras recorrían la casa, encontraron otra en las mismas condiciones, en una habitación donde además se hallaban dos cuerpos tendidos sobre una cama.
Se trataba de un hombre de unos 50 años, aparentemente conocido como Romerito, y una mujer menor que este, los que según trascendió presentaban signos de haber sido heridos con arma blanca.
Al lugar acudieron la fiscal de turno, doctora Albertina Chichi, junto al coordinador de fiscales, doctor Fernando Lomardi, acompañados por el jefe de Policía, comisario mayor Miguel Pérez y el subjefe, comisario inspector Martín Galliard.
Dado el cuadro encontrado se hizo imprescindible la intervención de las División Criminalística e Investigaciones, que trabajaron bajo el más estricto silencio levantando indicios y elementos, así como tomando declaración a vecinos del lugar.
En principio no se descartarían hipótesis sobre lo ocurrido dentro del inmueble, pero todo indicaría que se estaría ante un nuevo caso de femicidio seguido de suicidio, lo que deberá ser corroborado con los elementos probatorios levantados en el escenario del horroroso hecho y los resultados de las autopsias a los cuerpos, que serán practicadas este martes a partir de las 17 horas, en la morgue del hospital Urquiza.
Ninguna autoridad quiso aventurar lo que verdaderamente sucedió, pero sería evidente que no habría intervenido una tercera persona en el suceso.
Fuente: 03442
