La Asociación de Bomberos Voluntarios de Concepción del Uruguay, al igual que sus entidades hermanas de la República, está preocupada por la decisión de la Secretaría de Seguridad de intentar obtener recursos destinados al funcionamiento de los cuarteles en la Argentina.
Al respecto, Pedro Pablo Bisogni, manifestó que en 1998 se sancionó la ley de financiamiento al sistema nacional de bomberos. En virtud de ello, el 0,5 por ciento del seguro contratado por cada ciudadano se destina a ese fin; es decir a sostener a los 900 cuarteles, 26 federaciones y al Consejo Nacional con su academia de capacitaciones. Eso significa 1.700.000.000 de pesos por año. “La Secretaría de Seguridad y algunos funcionarios han visto interesantes esos números, que no son recursos del Estado sino de cada uno de los contribuyentes o usuarios para el financiamiento específico del sistema de bomberos”, consignó. El titular de la Asociación de Bomberos Voluntarios expresó que se efectuó un planteo a la Justicia, que les dio favorable. No obstante, el Estado retiene un dinero, más de 800.000.000 de pesos –en 2017 se pagó una parte- y ahora se pretende “sacar” casi un 60 por ciento de los recursos. “Esta cuestión no tiene lógica ni sentido común”, dijo el interlocutor para acotar que “si no fuera por los bomberos voluntarios, la Argentina no tendría protección para actuar en incendios y accidentes”.
A ello hay que sumarle el aporte de 45.000 personas que trabajan en forma voluntaria.
Recursos necesarios
Bisogni manifestó que en 2017 el Cuartel local gastó 400.000 pesos en combustible y destinó por más de 2.500.000 sólo para funcionar. A su vez, con el 1.500.000 de pesos recibido como subsidio de la Nación y los recursos genuinos –obtenidos por la venta del bono contribución- se invirtió en la compra de dos nuevas unidades.
“Si la Nación nos quita esos fondos, tendríamos que reducir la cantidad de vehículos o funcionar, como en otros lugares, solo con un telefonista, por lo que se resentirá el servicio o quedará a la mínima expresión”, remarcó el titular de la Asociación de Apoyo.
“El sistema nacional funciona en la Argentina por los bomberos voluntarios; de otra forma, no existiría. En Uruguay, Brasil y Chile, el servicio es solventado por el Estado, pues no funciona con intenciones sino con recursos”, sostuvo. En Entre Ríos existen más de 50 cuarteles y hay varios que tramitan su personería jurídica. “Esperamos contar con el apoyo de la Provincia. Las autoridades manifestaron que nos respaldarán, pues ven al servicio como necesario, pues se intervino –desde noviembre de 2017 a abril de 2018 en más en 1.800 incendios en zonas rurales y más de 100 en basurales”, indicó Bisogni al dar cuenta de la importancia de la acción desplegada por los bomberos. Ante el planteo de la reforma de la ley de bomberos, propiciado por la Nación, se proyecta efectuar un abrazo simbólico al Congreso y solicitar el apoyo de los legisladores. (La calle)
