El flamante secretario general de Agmer Uruguay, Walter Baccon asumió a su cargo luego de que se produjera el recambio de autoridades del gremio a nivel local y provincial. En este marco, dialogó con LA CALLE y manifestó que el primer objetivo será solicitar al gobierno provincial una audiencia en el mes de enero para comenzar con las paritarias, indicando que el inicio del ciclo lectivo se encuentra en peligro si no se llega a un acuerdo salarial.
En cuanto a la realidad actual opinó: “sabemos que el contacto nacional y provincial es muy difícil y que a futuro también va a ser difícil. Estamos ante ajustes y reformas que quieren llevar adelante. Desde el gremio estuvimos presentes en las dos marchas en contra de la reforma a la ley previsional y fueron marchas muy multitudinarias pese a que fueron invisibilizadas por los conflictos frente al Congreso”.
Año difícil
“El 2018 creemos que va a ser muy difícil porque ya hemos visto los anuncios del gobierno de un paquete de medidas que van en sentido de la quita de los derechos y las conquistas de los trabajadores “, recalcó el nuevo delegado y añadió: “ahora estamos justamente en nuestro recambio de conducción en toda la provincia y seguramente pasadas las fiestas comenzarán las negociaciones paritarias”.
“El último Congreso de Agmer ratificó el estado de asamblea, alerta y movilización y además desde enero solicitaremos audiencias para hablar de lo que hoy es importante, que es la parte salaria. Nosotros no decimos que no se van a iniciar las clases sino que está impedido el comienzo si las condiciones, tanto en las reforma s como en lo salarial, no se llega a un acuerdo”, declaró Baccon.
Por otro lado, cabe señalar que en el Congreso manifestaron su repudio a la decisión de Bordet y enfatizaron: “en la provincia de Entre Ríos es pública y notoria el alineamiento del gobernador Bordet al gobierno nacional, que se observó en la firma acrítica del nuevo pacto fiscal sin aclarar sus repercusiones para la Caja de Jubilaciones de la provincia ni en convocarnos formalmente para informarnos sobre sus definiciones políticas en un contexto de incertidumbre, en adherir a la reforma de la ley de ART sin ningún consenso de los trabajadores y una política de salarios por debajo de la inflación real. En el vergonzoso compromiso de renunciar a todo reclamo por la deuda del Estado Nacional con la provincia por no haber cumplido con el 34% que establece la Ley de Coparticipación.
En la sanción sobre tablas de un presupuesto 2018, caracterizado como de recorte, ajuste y achique; al mantener la misma cantidad de horas cátedra que el de 2017, y sobre todo por las fantasiosas previsiones sobre un interanual de 17%.”. (La calle)
